Programa “A convivir se aprende” de la UCT logra positivo impacto y masiva convocatoria en las comunidades educativas de La Araucanía  

Disminución de episodios de violencia escolar en las comunas con las que se trabajó, mayor institucionalización de prácticas formativas en las escuelas y el reconocimiento por parte del 90% de los participantes de haber adquirido herramientas para gestionar la convivencia y hacer frente a la violencia escolar, fueron algunos de los resultados del programa.

A tres años de la puesta en marcha del Programa “A convivir se aprende”, ACSA, del Ministerio de Educación y ejecutado por la Universidad Católica de Temuco en la Región de La Araucanía, el impacto logrado se refleja en las cifras que arroja esta iniciativa, que tuvo como objetivo fortalecer en los equipos de gestión y de convivencia escolar -a nivel de sostenedores y escuelas de comunas focalizadas-, las competencias y habilidades para enfrentar situaciones de violencia escolar, prevenir dicha violencia y favorecer la convivencia escolar desde un enfoque preventivo, formativo y territorial.

Es así como el programa fue implementado en catorce comunas como Currarehue, Ercilla, Nueva Imperial, Padre Las Casas, Pucón, Villarrica, Cuaracautín, Temuco, Angol, Cunco, Freire, Gorbea, Lautaro y Loncoche alcanzando a más de 100 mil beneficiarios directos, teniendo como resultado la disminución de episodios de violencia escolar reportados, mayor institucionalización de prácticas formativas en las escuelas y el reconocimiento por parte del 90% de los participantes de haber adquirido más herramientas para gestionar la convivencia y hacer frente a la violencia escolar que es una de las problemáticas que más preocupa a las familias, al sistema educativo y la sociedad.

Cabe destacar que el Programa ACSA consideró el desarrollo de redes territoriales de convivencia que reunieron a sostenedores, equipos de gestión y docentes en al menos ocho sesiones anuales por comuna; acompañamiento focalizado, que benefició a más de 80 establecimientos en 880 sesiones de trabajo en terreno; y Encuentros Regionales de Formación, abiertos a toda la región, con más de 2.700 asistentes en cinco jornadas y el desarrollo de alrededor de 150 talleres y seminarios formativos en el área.

COMPARTIENDO EXPERIENCIAS DEL TERRITORIO

Estos resultados se dieron a conocer en el Segundo Encuentro de Formación A Convivir se Aprende 2025, que se transformó en un espacio de reflexión, diálogo y construcción conjunta en torno a los desafíos y aprendizajes de la convivencia educativa en la Región de la Araucanía,  bajo el lema “Compartiendo Experiencias del Territorio”.

La jornada reunió a autoridades encabezadas por la Seremi de Educación, Marcela Castro Armijo;  el Prorrector de la UCT, Carlos Lüders Post; el Vicerrector de Investigación y Posgrado, Claudio Inostroza Blancheteau; el Vicedecano de la Facultad de Educación, Patricio Lagos Rebolledo; la Coordinadora Regional del Programa, Carmen Paz Tapia Gutiérrez; y la Investigadora Responsable del Programa Sandra Becerra Peña, participando académicos, equipos directivos docentes y representantes comunales que repletaron el Aula Magna de la UCT.

En la ocasión la Seremi de Educación, Marcela Armijo, destacó los resultados del Programa en la Región de La Araucanía y realizó un reconocimiento al Centro Convive UCT como equipo técnico “para la instalación de capacidades en gestión de la convivencia, desde un enfoque preventivo y formativo coherente a la política pública del país”, señaló.

El Prorrector de la UCT, Carlos Lüders Post, en su alocución reafirmó el compromiso de la Universidad y de la Facultad de Educación “con el fortalecimiento de la convivencia educativa en todo el sistema escolar de la Región promoviendo espacios inclusivos colaborativos y orientados al bienestar de las comunidades educativas”.

En tanto la Dra. Carmen Paz Tapia Gutiérrez presentó los avances y compromisos del período 2023- 2025 evidenciando el impacto alcanzado en materia de cobertura y acompañamiento territorial. Las evaluaciones del programa y del gobierno, muestran avances concretos: la percepción de violencia escolar disminuyó de un 70% en 2024 a un 54% en 2025, y el desgaste emocional de los equipos educativos bajó de un 55% a un 44%, lo que reporta grandes logros para las comunidades de La Araucanía.

La Dra. Sandra Becerra Peña, moderó la presentación de experiencias territoriales señalando que el programa logró una cobertura de más de 300 establecimientos en redes, subrayando la valiosa experiencia de “abordar la convivencia desde un enfoque formativo, preventivo y de escuela total, en coherencia a las estrategias transversales ministeriales“.

La presentación de experiencias territoriales estuvo a cargo de Juan Luis Castillo Álvarez de la comuna de Angol, y de Alejandro Iturriaga Niemann de la comuna de Curacautín.

PROYECCIÓN CON PROPUESTA ACADÉMICA

El Programa “A Convivir se Aprende” culmina su ciclo en La Araucanía dejando capacidades instaladas en las comunidades educativas de la región. Su legado no se agota en la ejecución ministerial, sino que a través de la Facultad de Educación proyecta esta experiencia con una nueva propuesta académica.

Se trata del Diplomado en Convivencia Educativa: Reflexiones y Estrategias para el Buen Trato, que inició el 30 de septiembre de 2025. Este programa formativo está dirigido a profesorado desde parvulario a 4° medio, equipos de convivencia escolar, equipos directivos, asistentes de aula y otros profesionales interesados en la temática.

El diplomado busca que los participantes desarrollen la competencia de gestionar la convivencia educativa para el buen trato, integrando dimensiones teóricas, normativas, éticas y prácticas. Entre sus resultados de aprendizaje se espera que los estudiantes analicen críticamente situaciones problemáticas de convivencia y las respuestas institucionales, contrastando con la Política Nacional de Convivencia Educativa y el Modelo de Escuela Total Multinivel y sean capaces de diseñar propuestas colaborativas que fortalezcan vínculos, promuevan climas escolares nutritivos y la resolución pacífica de conflictos, contribuyendo a la prevención de la violencia escolar y al desarrollo de competencias socioemocionales y valores inclusivos.

Este diplomado constituye un hito estratégico para dar sostenibilidad académica al Programa ACSA, asegurando que los aprendizajes y experiencias de estos tres años se proyecten en la formación y actualización de docentes y equipos educativos de toda la región.

María Loreto Moya González

Periodista